El gobierno de Bellido, el más caro de la historia de Córdoba y el más incapaz en la gestión

El grupo municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Córdoba ha hecho balance de la gestión realizada por el gobierno de PP y Cs en 2020, un año perdido en el que la derecha ha demostrado su «incapacidad para la gestión de lo concreto», más allá de las dificultades impuestas por la pandemia y pese a que el alcalde, José María Bellido, tiene «el gobierno más caro de la historia» por el elevado número de cargos directos nombrados, entre asesores, coordinadores y directores o jefes de gabinete. Prueba de ello son la bajísima ejecución del presupuesto, la falta de nuevos proyectos de ciudad o algo tan constatable como la ausencia de obras en las calles, que no solo permiten mejorar los barrios sino que además generan empleo.

Para IU, el gobierno de Bellido está siguiendo la misma hoja de ruta que anteriores gobiernos del PP: cuando están al mando del Ayuntamiento, sube el paro, suprimen la participación ciudadana y los servicios públicos se privatizan. La última víctima del ansia privatizadora de la derecha ha sido Sadeco, donde Cs pretende externalizar la limpieza de contenedores. Otros intentos, sin embargo, han resultado fallidos por acción de la oposición, que impidió que se privatizada la gestión de una seña de identidad de Córdoba como es el Festival de la Guitarra.

Además, sostiene IU, el gobierno de Bellido no se ha preocupado en 2020 por avanzar en cuestiones básicas de gestión que sí podrían haberse trabajado durante la pandemia, como la concesión de licencias en Urbanismo. En 2020 se han concedido un 30% menos de permisos y el Servicio de Licencias tiene menos personal que en el anterior mandato, pese a que el PP prometió que convertiría Urbanismo en un aliado para el sector privado.

Tampoco existe estrategia alguna en el ámbito turístico, mientras que otras ciudades con menos recursos que Córdoba se están poniendo las pilas para ofrecer lo mejor de sí mismas una vez que la pandemia permita reactivar este sector. El espectáculo nocturno del Alcázar sigue parado y no hay noticias del pliego de contratación, el Centro de Interpretación de los Patios de Trueque, 4 está cerrado y la Judería se desangra sin visitantes mientras el gobierno de PP y Cs impulsa innovaciones urbanísticas para seguir gentrificando el Casco, pese a que esta pandemia está poniendo de manifiesto una vez más los riesgos de echar a los vecinos y vecinas de este barrio de la ciudad.